¿No te funciona la caldera de gas? Las averías más comunes

Muchas son las preguntas que te haces cuando no funciona la caldera de gas en vista de que estas calderas son uno de los equipos de calefacción preferidos para proteger los hogares del frío, especialmente en esas épocas de invierno en las que las temperaturas ambientales suelen ser muy bajas.

Y aunque son muchos los motivos por lo que una caldera de gas deja de funcionar correctamente, o simplemente deja de funcionar, es fundamental tener en cuenta algunas recomendaciones que ha de observar el usuario en la caldera para comprobar el correcto funcionamiento de ésta y que son:

-. La caldera está enchufada correctamente. La posición del enchufe de conexión de la caldera no se ha variado con respecto a como estaba en un principio, en el caso de desenchufarse, por algún motivo.

-. El termostato tiene pilas cargadas.

-. La presión del agua de la calefacción está entre 1-1,5 bar de presión en frío, visto en el manómetro de caldera, (cuando la calefacción está en marcha puede subir dicha presión llegando incluso hasta 2,5 bar).

-. La temperatura de consigna tanto de calefacción como de ACS están en los valores deseados por el usuario. Para calefacción 50-80ºC, dependiendo del tipo de emisores que se disponga (de baja o alta temperatura) y del tipo de generador que se disponga (estándar 70-80ºC, y de condensación 50-80ºC). Para el ACS lo normal es de 38ºC-43ºC, si no se tienen muchas pérdidas de calor por el circuito.

-. Supervisar la ausencia de alarma en caldera, la cuál se manifiesta normalmente a través de iluminación LED en la que el código de colores e intermitencias en la iluminación indica un código de error determinado y por lo tanto orienta de la avería que tiene la caldera (según el manual de instrucciones de usuario que se suministra con la caldera). Lo normal es que si ves una luz verde es que todo va bien. Si hay una luz naranja o roja entonces es síntoma de alguna anomalía.

Algunas de las averías más usuales que puede tener la caldera de gas, impidiendo que se llegue a la temperatura de confort en tu hogar o dispongas de agua caliente sanitaria (ACS), son las que se explican a continuación.

Averías por los cuales no funciona la caldera de gas

➡ Funciona la calefacción pero no el ACS

Es posible que el flujostato no detecte caudal al abrir el grifo de agua caliente, bien sea porque el flujostato está averiado o porque no se tenga la presión suficiente de la red para que el agua salga con un mínimo de caudal. Si en su vivienda no tiene problemas de presión de agua, entonces lo más razonable es que el flujostato está averiado, por lo que la recomendación es la actuación de técnico cualificado para la sustitución de la pieza.

En algunas calderas de gas, además del flujostato está la válvula de tres vías que, cuando hay demanda de ACS, se posiciona para que el primario de caldera se desvia hacia el intercambiador de calor donde se produce la transferencia de energía entre caldera y agua de la red. Si dicha válvula se queda bloqueada por algún motivo, y se queda en posición calefacción, entonces no producirá ACS. En este caso recomendamos la actuación de técnico acreditado para reparación de la válvula o proceder a su sustitución, en caso de necesidad.

➡ Ha bajado de presión

Cuando una caldera funciona sin presión se corre el riesgo de que el equipo se sobrecaliente, incluso se queme si no dispone de dispositivo de seguridad de temperatura, produciéndose fisuras en el intercambiador de calor.

Para evitarlo es necesaria la supervisión de la presión del agua del sistema de calefacción a través del manómetro y realizar el llenado de agua en caso de necesidad, a través de la válvula de llenado de caldera, a una presión de 1-1,5 bar en frio.  En el caso que el usuario llene la instalación y la presión vuelva a bajar se deberá supervisar la instalación hidráulica de calefacción, desde caldera a emisores de calor (radiadores, por ejemplo) para detectar posible fuga de agua de primario y proceder a su reparación.

➡ La bomba de circulación de la calefacción se ha bloqueado

Esta situación se puede presentar normalmente cuando se intenta encender la caldera en modo calefacción después de la temporada de verano, en la que la bomba ha estado parada un largo periodo de tiempo, por lo que puede estar gripada.

Con esta avería, la caldera se enciende pero en un corto periodo de tiempo sube de temperatura pudiendo presentarse dos situaciones: la caldera llega a la temperatura de consigna de calefacción y se para, aunque en realidad no hay calefacción, o salta el termostato de seguridad de caldera manifestándose la avería a través de una alarma en iluminación.

Es necesario proceder a desgripar la bomba de circulación, en el mejor de los casos o a su sustitución en caso de necesidad.

➡ Anomalía en sonda de temperatura

Es posible que alguna sonda de temperatura se haya desajustado, por la razón que sea, y no mida la temperatura real del agua, en cuyo caso no se realizará un control correcto de la calefacción y/o del ACS, calentando más de la cuenta o o no llegando a la temperatura de consigna. Si detenta que su caldera no calienta correctamente la calefacción o ACS, uno de los motivos puede ser la sonda de temperatura, por lo que se deberá proceder a su sustitución por técnico cualificado.

Cuando la sonda de temperatura se avería entonces salta una alarma en foma de luminoso en la caldera, indicando dicha avería, en cuyo caso será necesario la sustitución de la sonda correspondiente por técnico cualificado.

Los radiadores han dejado de calentar

Otro de los motivos por los cuales la caldera de gas no funciona correctamente, es a causa de la acumulación de lodo o de aire en el sistema, que obstaculiza el flujo de agua caliente a los radiadores u otros emisores de calor, impidiendo que el calor se distribuya de manera uniforme.

Para eliminar el aire del circuito primario de calefacción será necesario purgar la instalación en los puntos más altos. Dichos puntos suelen coincidir con la propia caldera, que lleva incorporado un purgado automático, y los emisores de calor, los cuáles suelen disponer de un purgador manual que el usuario deberá abrir para forzar a que el aire sea expulsado. En el proceso de purga se baja la presión del circuito, por lo que se deberá rellenar la instalación durante este proceso para mantenerla dentro de los valores normales y favorecer también la acción de purga.

La existencia de aire en la instalación se puede manifestar de dos formas:

-. En caldera, si la cantidad de aire no es significativa, se nota un ruido como de burbujeo cuando la calefacción está encendida. Para eliminarlo bastará con aumentar un poco la presión de la instalación para forzar que se purgue el aire por el purgador automático de caldera. En el caso que la cantidad de aire en caldera sea muy significativa, debido a que el purgador esté deteriorado y no haga la función de purga automática, la temperatura de caldera se elevaría significativamente saltando el termostato de seguridad de caldera. En este caso se deberá proceder a la sustitución del purgador automático.

-. En el equipo emisor, como pueden ser los radiadores. El usuario notará que habrá radiadores que no se calientan de forma uniforme o que simplemente no se calientan (debido a la cantidad de aire contenida en su interior), o también la aparición de ruidos en los emisores como de burbujeo, por lo que se deberá proceder al purgado manual de dichos emisores.

➡ Fallos en el termostato

Como anticipamos en el inicio de este artículo, muchas veces la caldera no funciona porque simplemente el termostato se ha quedado sin pilas. Es por ello por lo que, antes de llamar a técnico,      cerciorarse que el termostato funciona correctamente.

➡ Has oído una pequeña explosión

Este tipo de daños por los cuales la caldera de gas no funciona de manera apropiada, puede deberse a múltiples causas como el hecho de que la cámara de combustión esté sucia, que haya encendido con un electrodo mal orientado o la válvula de gas no esté regulada correctamente.

➡ Emite un silbido

En el caso de que la caldera de gas comience a emitir el sonido de un silbido, el fallo puede deberse a que el intercambiador de calor se encuentre deteriorado o está sucio.

➡ Se encuentra produciendo un ruido de vibración

Una de las formas en las cuales se puede evidenciar que la caldera de gas no funciona bien es, cuando esta empieza a emitir vibraciones, lo cual puede deberse a que la carcasa se encuentra colocada de forma errónea o a que existe un fallo en el ventilador o la bomba.

➡ Gotea cuando se enciende la calefacción o sube mucho la presión

En los casos en los que la caldera, funcionando en calefacción, sube mucho la presión del primario, es síntoma de que el vaso de expansión está averiado (o le falta aire o la membrana está rota). En este caso la presión de la caldera sube hasta la presión de la válvula de seguridad de caldera, que es de 3 o 4 bar, normalmente. Por encima de esa presión la válvula de seguridad “expulsa” el agua para mantener, como máximo, dicha presión. Se puede dar el caso en el que el aliviadero de la válvula de seguridad esté conducido a un desagüe, pero la recomendación es que no se haga para que se detecte con facilidad esta anomalía.

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