En estos últimos años se ha observado que hay una tendencia al alza en la utilización de la biomasa, como una alternativa a la calefacción de nuestros hogares. Esta tendencia también se ha extendido al sector terciario, como colegios y otras administraciones públicas e incluso comunidades de propietarios de viviendas que se han visto en la situación de cambiar un quemador de gasoil a pellet.
Pero, ¿Qué factores hay que tener en cuenta para poder sustituir una caldera por otra? ¿Cuáles son la ventajas e inconvenientes?
En esta ocasión en Climatik vamos a despejar todas estas preguntas.
Razones que origina esta tendencia al alza
Las calderas de gasoil han sido el equipo predilecto para obtener calefacción y ACS en nuestros hogares y trabajos. Desde hace décadas su utilización ha sido generalizada sustituyendo las antiguas calderas de carbón.
Con el paso de los años las calderas de gasoil han conseguido ser cada vez más eficientes hasta llegar a las calderas de gasoil de condensación, con rendimientos superiores al 98 %.
Pero en la actualidad, con objeto de cumplir con las diferentes directivas europeas relacionadas con el cambio climático y los protocolos ambientales, la tendencia es a disminuir el consumo de combustibles de origen fósil. La sociedad está cada vez más concienciada en alternativas renovables o combustibles de origen no fósil, como es la biomasa.
Por ello cada vez son más las personas que se animan a cambiar el quemador de gasoil a pellet.
Como sabemos, la biomasa es un combustible de origen vegetal y su balance global en cuanto a emisiones de CO2 es neutro, es por ello por lo que se fomenta la utilización de dicho combustible. Pero de ahí a que la biomasa sea una fuente de energía limpia y verde, nos podría costar creerlo.
Lo que sí es verdad es que desde tiempo inmemorables se ha utilizado la biomasa como combustible para calentarnos, de siempre han existido las chimeneas y estufas donde se quemaba madera. El desarrollo de la tecnología nos ha llevado a que exista una gran variedad de equipos de biomasa (estufas, hidroestufas) con las que poder calentar nuestros hogares y tener agua caliente sanitaria, de una forma eficiente.
Hoy en día puede ser una práctica habitual cambiar el quemador de gasoil de la caldera y sustituirlo por quemador de pellets, aunque hay que tener en cuenta que no a todas las calderas se puede realizar dicha sustitución. Lo más normal, cuando se decide cambiar de combustible de gasoil a pellets es sustituir la caldera, aunque para ello se deberá tener en cuenta algunos factores.
Por esa razón, hemos creado esta pequeña guía para lograr hacer esta tarea de manera práctica y sencilla y así ahorrar tu tiempo y el esfuerzo que requiere.
Cómo cambiar el quemador de gasoil a pellet
El primer factor a tener en cuenta a la hora de pensar en este cambio es en el espacio disponible donde está ubicada la caldera. Las de biomasa suelen tener un tamaño sustancialmente mayor a las de gasoil abarcando 1/3 extra de lo que usualmente cubría una caldera de gasoil. Y por supuesto, para favorecer la combustión, es necesario que la sala esté adecuadamente ventilada.
El segundo factor a tener en cuenta es la salida de humos. Es recomendable que la conducción sea lo más corta posible y permanentemente de forma ascendente, desde caldera hasta la salida, para que haya el suficiente tiro. En la mayor parte de los casos se podría reutilizar la chimenea utilizada en la caldera de gasoil.
El tercer factor a tener en cuenta es el espacio necesario para almacenar el combustible. Hay que tener en cuenta que para almacenar la misma cantidad de energía, el pellets ocupa más espacio que el gasóil. Así que, dependiendo de la autonomía que se quiera tener, será necesario tener en cuenta un espacio extra con la biomasa.
Al sustituir la caldera de gasoil por la de pellets, se podrá mantener la misma instalación hidráulica de calefacción desde caldera a radiadores y de agua caliente sanitaria. Esto en el caso que se utilicen calderas de biomasa. Ya que en el caso de querer calefactar una habitación directamente, utilizaremos las estufas, con la que no es necesario ningún sistema extra de distribución del calor.
Repasemos los beneficios que podemos tener al instalar una caldera de pellets.
Ventajas del quemador de pellet
La biomasa se trata de un combustible que está revolucionando la manera en la que trabajan los quemadores modernos sin perder un ápice de rendimiento o calidad.
La biomasa que se utiliza en los pellets es completamente renovable, en la que la industria de la madera cercano al consumidor se ve favorecida, contribuyendo al fomento del empleo local y llegando a ser respetuoso con el medio ambiente si su gestión es la correcta.
Con las calderas de pellets conseguimos rendimientos incluso superiores al del gasoil, haciendo que su uso sea muy atractivo. La capacidad de modulación de dichas calderas
Cuenta con la ventaja además que el pellet no genera el mismo nivel de gases de efecto invernadero de lo que lo hace el gasoil, además de ser completamente orgánico y sin derivados del petróleo.
Factores a tener en cuenta de las calderas de pellets
Cambiar el quemador de gasoil a pellet o cambiar la caldera, tiene una serie de detalles que se deben cuidar. Por ejemplo: los pellets suelen abarcar una cantidad considerable de espacio, por lo que es recomendable tener espacio suficiente para almacenarlos sin obstruir o causar molestias.
El mantenimiento de estos quemadores debe ser un poco más recurrente, ya que los pellets suelen dejar una mayor cantidad de residuos que pueden obstruir el paso del combustible nuevo, haciendo que se reduzca la eficacia de la estufa. Sucede de igual manera en el sistema de salida de humos, por lo que una limpieza cada cierto tiempo de estos conductos es conveniente para mantener un rendimiento óptimo.
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